Las elecciones municipales parciales celebradas este domingo en nueve localidades de Río Negro ofrecieron varios datos clave que permiten leer las tendencias políticas provinciales de cara a octubre, cuando se celebrarán elecciones nacionales legislativas.
JSRN: un poder intacto pero con señales de advertencia
El partido provincial Juntos Somos Río Negro (JSRN), que lidera el gobernador Alberto Weretilneck, logró sostenerse como fuerza preponderante en varias localidades estratégicas:
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Retuvo la intendencia en Jacobacci mediante la alianza local Somos Jacobacci (JSRN-UCR-Redes).
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Se impuso en Sierra Colorada.
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Logró acuerdos políticos exitosos en lugares como Darwin y Pomona, donde intendentes aliados al gobierno provincial consolidaron sus espacios.
Sin embargo, la performance de JSRN no fue aplastante.
La baja participación —especialmente en municipios con alta influencia provincial como Jacobacci, con apenas un 45% de asistencia— refleja cierta fatiga o desmovilización del electorado, un fenómeno que debe preocupar a Weretilneck de cara a las elecciones nacionales.
Además, en algunas localidades como Darwin y Belisle, la UCR ganó de manera independiente, mostrando que, aunque aliados a nivel provincial, los partidos tradicionales conservan peso propio y pueden ser factores de negociación y autonomía dentro del frente oficialista.
El peronismo: fragmentado pero competitivo
El peronismo en Río Negro —fragmentado en sellos como Unión por Jacobacci y otros armados locales— mostró que aún puede disputar poder, aunque ya no en condiciones de hegemonía como en décadas anteriores.
En Jacobacci, Unión por Jacobacci estuvo muy cerca de arrebatar la intendencia, perdiendo apenas por 139 votos. Además, logró quedarse con una banca en el Concejo Deliberante.
Este desempeño muestra que, pese a la fragmentación, el peronismo conserva un núcleo duro de votantes que podría fortalecerse si en octubre se presenta con estrategias más coordinadas y candidaturas competitivas.
Las fuerzas nacionales: PRO y La Libertad Avanza
El PRO —que en estas elecciones compitió en lugares como Pomona y Darwin— quedó lejos de las expectativas. En Pomona, perdió por una diferencia abrumadora contra el intendente aliado a Weretilneck, y en Darwin fue ampliamente superado por la UCR.
La Libertad Avanza, que no presentó candidatos en estos comicios locales, tampoco logró ser un factor de arrastre indirecto de participación o polarización. La elección fue absolutamente territorial y municipalizada, sin impacto nacional.
Esto confirma que en Río Negro el fenómeno libertario aún no ha logrado construir estructuras sólidas a nivel local, algo que puede limitar sus resultados en octubre si no logra instalar figuras fuertes rápidamente.
SINTESIS
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JSRN sigue siendo el partido más fuerte, pero su "voto automático" no es inagotable.
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La UCR mantiene capacidad de triunfo local, incluso fuera de JSRN, y será un actor clave en la gobernabilidad futura.
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El peronismo resiste, y si logra reorganizarse puede disputar seriamente bancas en el Congreso en octubre.
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El PRO y los libertarios siguen sin enraizarse en la provincia, y necesitarán estrategias diferenciadas si quieren crecer.
De cara a las elecciones nacionales, el resultado de este domingo fue un buen termómetro para Weretilneck, que consolida su esquema de alianzas, pero también recibe una advertencia: sin una estrategia de movilización real.
