Un oyente nos comparte una reflexión interesante y preocupante sobre la situación del tránsito en nuestra localidad, específicamente en la zona donde está ubicada la oficina de turismo. Nos comenta lo difícil que resulta incorporarse a la ruta cuando hay una fila de autos y nadie cede el paso, a pesar de que, en teoría, quien viene por la derecha debería tener prioridad.
Nuestro oyente señala algo clave: la falta de respeto por las reglas de tránsito básicas, como la prioridad de paso, sobre todo cuando hay reductores de velocidad, que en este caso deberían ayudar a facilitar la integración del tránsito en lugar de complicarla. Este tipo de situaciones no solo genera frustración, sino también un potencial peligro para los conductores y peatones.
La comparación que hace con otras ciudades, como Bariloche o Esquel, donde el respeto por las normas de tránsito parece ser más evidente, resalta aún más la necesidad urgente de implementar educación vial en El Bolsón. No se trata solo de poner señales o reductores de velocidad, sino de educar a los conductores sobre cómo comportarse en situaciones de tráfico, fomentando la cortesía y el respeto mutuo.
Es un llamado de atención importante para que las autoridades municipales consideren la posibilidad de llevar a cabo campañas de concientización y programas de educación vial que ayuden a mejorar el comportamiento en las calles.