En medio de la creciente crisis hospitalaria que afecta a los centros de salud de la provincia, Sandra Contreras, secretaria de ATE en la zona, criticó duramente la implementación de códigos QR en el hospital de El Bolsón para calificar al personal de enfermería. Para Contreras, esta medida representa "una perversidad terrible" del gobierno, que busca desviar la atención de la verdadera problemática, responsabilizando a los trabajadores de la salud por una situación que es producto de la falta de políticas públicas adecuadas.
"La crisis hospitalaria está atravesando a toda la comunidad, pero mayormente afecta a los trabajadores hospitalarios, que no dan abasto", señaló Contreras. "Están cubriendo múltiples baches por la falta de personal en todos los sectores, lo que les genera un alto nivel de estrés y pone en riesgo su salud integral".
Según la dirigente sindical, la estrategia del gobierno de instalar códigos QR para que los pacientes evalúen la atención es una maniobra para desviar el foco de la crisis estructural en el sistema de salud. "Es perverso que el gobierno le pida a la comunidad que evalúe a los trabajadores, porque eso puede llevar a que los vecinos piensen que son ellos quienes están fallando, cuando en realidad la falla está en la falta de políticas públicas en salud", argumentó.
Contreras destacó que los problemas van mucho más allá del personal: "Hace falta un presupuesto que permita desde mejorar los salarios hasta asegurar insumos, medicamentos, equipos médicos y el mantenimiento de la infraestructura. Aquí en El Bolsón, por ejemplo, la morgue sigue sin funcionamiento. Es un desastre lo que está pasando".
La dirigente también subrayó las extenuantes condiciones de trabajo que enfrentan los profesionales de la salud, quienes se ven obligados a cubrir turnos prolongados debido a la escasez de personal. "Los trabajadores terminan haciendo jornadas interminables. Médicos que hacen guardias de 24 horas y luego tienen que ir al consultorio externo o a las salas barriales. Es insostenible", afirmó.
En un tono de indignación, Contreras cuestionó la falta de liderazgo en el Ministerio de Salud, que sigue sin ministro tras la renuncia de Ana Senesi. "¿Por qué no implementan un código QR para que evaluemos cómo está trabajando el ministerio, los funcionarios y el propio gobernador? El hilo se corta siempre por lo más delgado, y los que sufren son los trabajadores", concluyó.
Sandra Contreras dejó claro que, tanto como secretaria general de ATE como ciudadana, está indignada por la falta de políticas públicas que garanticen una atención de calidad en los hospitales de la provincia.
