En una sesión cargada de testimonios y posturas firmes, el Concejo Deliberante de El Bolsón aprobó por amplia mayoría un proyecto de comunicación que exige al Gobierno Nacional la reactivación de obras públicas esenciales suspendidas en barrios populares. La vecina Paola Oyarzo ocupó la Banca del Vecino y relató el impacto de la paralización. El concejal Efraín Ranea fue el único en votar en contra.
Durante la sesión del 28 de mayo, el Concejo Deliberante de El Bolsón debatió un proyecto de comunicación que solicita al Poder Ejecutivo Nacional información y medidas urgentes para continuar con diversas obras paralizadas. Entre ellas, se destacan la urbanización de Loma del Medio, la construcción de 245 viviendas bajo el programa Procrear y otras mejoras en barrios como La Aldea.
Paola Oyarzo, referente de cooperativas locales, fue contundente en su exposición desde la Banca del Vecino:
"Somos trabajadores y habitantes de barrios populares. Organizarnos en cooperativas nos permitió llevar adelante más de 500 conexiones de luz seguras y construir espacios comunitarios. Hoy 50 familias se están quedando sin trabajo y necesitamos respuestas".
Oyarzo remarcó además la precariedad en la que viven cientos de familias: “En Loma del Medio hay vecinos sin agua potable ni caminos transitables. No es justo que las obras se frenen y que el esfuerzo local quede sin continuidad”.
Los concejales respaldaron mayoritariamente el reclamo. La edil Laura Monsalve apuntó:
“Estas obras no son promesas, estaban aprobadas y financiadas. El impacto de su paralización golpea directamente a la economía de las familias y al trabajo local”.
Desde otra mirada, Efraín Ranea explicó su negativa a acompañar el proyecto:
"Lo que se reclama aquí son promesas falsas del peor gobierno nacional de la historia. La responsabilidad por los servicios básicos es provincial y municipal. No vamos a seguir avalando mentiras que generaron expectativas y dejaron tirados a los vecinos".
La postura de Ranea fue rechazada por sus pares. Lucas Castillo respondió:
"Esto no es ideología. Las obras existen, están en marcha y son necesarias. La reactivación de la obra pública debe ser una política de Estado".
El presidente del Concejo, Agustín Guasco, reforzó la idea de compromiso institucional:
"Los compromisos asumidos deben cumplirse. No hay ciudadanos de primera ni de segunda. La dignidad se construye con respeto, servicios y trabajo".
Finalmente, el proyecto fue aprobado con el voto positivo de todos los concejales, excepto el de Efraín Ranea.