El Gobierno nacional derogó una antigua restricción y autorizó el ingreso de carne bovina con hueso plano —como costilla o asado— a la Patagonia. La medida fue oficializada este viernes 27 de junio mediante la resolución 460/2025 del Senasa, tras varios meses de debate y postergaciones.
Según informaron desde la Secretaría de Agricultura y Senasa, el nuevo esquema busca “favorecer la oferta de carne manteniendo los estándares sanitarios y sin afectar acuerdos internacionales”.
¿Qué cambia con esta nueva resolución?
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Se levanta la histórica restricción para ingresar carne con hueso desde zonas del país donde se vacuna contra la fiebre aftosa hacia la Patagonia, donde no se vacuna.
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Solo se permite el ingreso de cortes con huesos planos (como costilla y esternón). Quedan excluidas medias reses y cuartos.
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Se establecen condiciones estrictas de sanidad y trazabilidad para garantizar el resguardo del estatus sanitario de la región.
Requisitos principales para el ingreso:
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La carne debe provenir de establecimientos habilitados por Senasa.
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Los animales deben haber sido aptos en controles pre y post mortem.
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Se excluyen cabeza, faringe, lengua y ganglios linfáticos.
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La carne debe pasar por un proceso de maduración a más de 2 °C durante 24 h, con pH menor a 6.
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Debe contar con doble empaque rotulado (primario y secundario).
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Las menudencias comestibles también deben cumplir con estos estándares.
También se flexibiliza el ingreso de material reproductivo:
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Se permiten embriones y semen de animales de zonas vacunadas, siempre que cumplan exigentes controles sanitarios, tiempos de permanencia y vacunación previa.
Desde el Gobierno nacional sostienen que esta actualización responde a la evolución del estatus sanitario del país y a una adecuación a los estándares internacionales establecidos por la OMSA (Organización Mundial de Sanidad Animal).
📌 Fuente: Resolución 460/2025 – Boletín Oficial de la República Argentina
