“Solo necesito una oportunidad”: el reclamo de Analía Romero, vecina de El Bolsón en riesgo de desalojo
Analía Romero vive desde hace 17 años en la misma casa en El Bolsón junto a sus dos hijas. Está ciega, cobra una pensión por invalidez y enfrenta un juicio de desalojo, pese a tener contrato vigente hasta febrero de 2026. La historia, difundida en la 105.5 Radio de la Cordillera, expone con crudeza las desigualdades que atraviesan muchas mujeres con discapacidad en Argentina.
“¿A dónde vamos a ir con mis hijas?”, preguntó con la voz quebrada durante la entrevista en el programa “Qué Mañana”. La vivienda, que originalmente alquiló de manera directa a una mujer ya fallecida, pasó a ser reclamada por supuestos herederos que aún no presentaron documentación legal. “Primero me dijeron que me la seguirían alquilando, que la pondrían en venta. Después, sin aviso, me mandaron una carta documento y me iniciaron juicio”, relató.
El conflicto se agravó cuando le aumentaron el alquiler a un monto que supera ampliamente sus ingresos. “Saben que no puedo pagarlo. Lo armaron con conocimiento de mis posibilidades económicas”, denunció. A pesar de sus esfuerzos por conseguir trabajo, asegura que “ni siquiera cumpliendo con el cupo laboral para personas con discapacidad” ha tenido respuestas. “Reparto currículums, doy capacitaciones y talleres ad honorem. Lo hago porque creo en lo que hago, pero también porque necesito trabajar”.
A lo largo de los años, no solo cumplió con todos los pagos: también mejoró la vivienda por su cuenta. “Pinté, arreglé, mantuve todo lo mejor que pude. Porque es nuestro hogar. Nunca imaginé que estaría así”, expresó.
Romero también cuestionó la lentitud judicial frente a otros reclamos, como la deuda de alimentos por parte del padre de sus hijas. “Hace más de un año que espero que actúe la justicia por eso, y no pasa nada. Pero este juicio de desalojo avanza rápido. No entiendo cómo funciona la justicia”.
El caso generó repercusión inmediata entre los oyentes y en redes sociales, donde se multiplicaron los mensajes de solidaridad. Analía recibe el acompañamiento de la abogada Marcela Fragala y mantiene el diálogo con el área de Desarrollo Social del Municipio. Tras la entrevista, se reunió con Ariel Aillapán, titular de la Secretaría, quien le expresó la intención de buscar una salida laboral.
“No quiero lástima ni privilegios. Quiero un trabajo. Con un sueldo, puedo pagar un alquiler. Pero así no puedo. Solo pido una oportunidad. Y mientras tanto, que nos dejen vivir en paz”, concluyó.
