En una charla íntima con Lucas Zeni, Paloma del Cerro habló de su propuesta artística, que fusiona ritmos electrónicos con sonidos ancestrales. “La música medicina canaliza mensajes que nos ayudan a vivir mejor, a estar en contacto con la tierra”, explicó.
Sobre su decisión de dejar la publicidad para dedicarse al arte, fue contundente:
“Había algo adentro mío que decía ‘por acá no es’. Me costó un montón dejar todo eso, pero no estaba feliz”.
También reflexionó sobre el impacto de los medios y la música comercial:
“La distracción estuvo siempre… ahora hay mucha más. Pero también hay otra conciencia. La gente está más selectiva con lo que escucha”.
Respecto a su próxima presentación en Estación Araucanía, Bariloche, Paloma adelantó que será una experiencia inmersiva:
“Estoy logrando una propuesta más sensorial, más profunda. Cada letra está pensada para tocar el corazón”.
Y ante la consulta sobre la resistencia que pudo haber recibido por mezclar folclore con electrónica, no dudó:
“Puede ser, pero no me importa. Si te gusta, me escuchás. Si no, no”.