Mar recordó que el 1 de diciembre es el Día Mundial de la Respuesta al VIH y que, en clave federal, Ciclo Positivo impulsa actividades en distintas provincias. En El Bolsón, estuvieron en Plaza Pagano con testeos rápidos, consejería y una charla abierta
También marcó que prefieren hablar de “día de la respuesta al VIH” y no de “lucha contra el VIH”, porque mucha gente ni siquiera tiene claro “contra qué estaría luchando”. Planteó que la idea de respuesta es más positiva y proactiva: se trata de informar, prevenir y acompañar, no de sembrar miedo.
Quiénes están más expuestos y por qué importa el diagnóstico temprano
Mar explicó que las estadísticas dependen mucho de la región del mundo, pero que en Argentina se ve una franja más expuesta entre los 25 y 45 años. Igual, aclaró que hablar solo de “grupos de riesgo” tiene límites, porque el VIH es un virus humano: todas las personas deberían saber cómo prevenirlo para vivir una sexualidad saludable.
Remarcó que lo principal es llegar a un diagnóstico temprano, porque si se detecta a tiempo el virus no avanza y el sistema inmune se mantiene fuerte. Cuando el diagnóstico es tardío, el sistema inmunológico suele estar deteriorado y es mucho más difícil recuperarlo, por eso insistió en la importancia de los testeos rápidos y gratuitos.
Estigma, derechos y la ley nacional de VIH
Sobre discriminación y estigma, Mar dijo que siguen existiendo y que las organizaciones trabajan todo el tiempo para que cada vez haya menos, pero que todavía falta que circule información clara y accesible. Marcó un “bache grande” del Estado en garantizar que esa información llegue a quienes la necesitan, mientras las organizaciones sostienen talleres, espacios de consulta y acompañamiento comunitario.
También explicó que adherir al tratamiento no es solo tener la medicación: si una persona no tiene para comer, difícilmente pueda sostener un esquema clínico estable. Por eso destacó la nueva ley nacional de VIH, hepatitis virales y otras infecciones, que busca una respuesta integral y aborda múltiples factores, no solo la pastilla.
Indetectable = Intransmisible y el cambio de mirada
Mar retomó una idea clave: si una persona vive con VIH, hace su tratamiento y alcanza carga viral indetectable, no transmite el virus; a esto se lo conoce como I = I (Indetectable = Intransmisible). Señaló que esa información es fundamental para derribar miedos y prejuicios y debería ser difundida masivamente, porque habilita vínculos, proyectos y maternidades/paternidades sin pánico.
También diferenció “transmisión” de “contagio”: el VIH no vive fuera del cuerpo, no queda “dando vueltas en el ambiente” como un virus respiratorio, por eso se habla de transmisión directa y no de contagio. Insistió en que esta precisión ayuda a entender mejor las vías reales de riesgo y a cortar con mitos que alimentan el estigma.
Vías de transmisión, PREP y acceso en el sistema público
Mar repasó que la transmisión del VIH puede darse por relaciones sexuales sin protección, por vía sanguínea (por ejemplo, una aguja compartida) o de madre a hijo en el embarazo, parto o lactancia, si no hay controles y tratamiento. Aclaró que con diagnóstico temprano y medicación adecuada, la transmisión vertical puede reducirse a niveles muy bajos, casi nulos.
Además explicó qué es la PrEP: profilaxis preexposición, un fármaco en pastilla para personas que no tienen VIH pero creen que pueden estar más expuestas, por ejemplo porque a veces tienen relaciones sin preservativo. Contó que la PrEP está incluida en la ley nacional y que cualquier persona puede solicitarla tanto en el sistema de obras sociales como en el sistema público de salud, donde debería estar disponible en hospitales.
Hacia más espacios de consulta y consejería
Mar adelantó que se está trabajando para que en el hospital de El Bolsón haya un espacio específico de consejería en VIH al menos un día a la semana. La idea es que cualquier persona pueda acercarse a hacer preguntas, asesorarse y, si lo desea, acompañar procesos de otras personas que viven con VIH.
