Reclamo de privados ignorado
un voto en contra
Nueva agencia público–privada
La sesión del Concejo Deliberante de El Bolsón trató y aprobó la creación de la Agencia de Turismo El Bolsón (que reemplaza al esquema previo del Consejo de Turismo), en un clima tenso por el reclamo de representantes privados que no pudieron usar la banca del vecino y se retiraron molestos del recinto. La ordenanza crea un ente autárquico de gestión turística, con directorio público–privado y patrimonio propio, pero deja instalado un fuerte debate político y jurídico sobre participación ciudadana y mayorías necesarias.
Qué se votó en el Concejo
El proyecto crea la Agencia de Turismo El Bolsón (ATEB) como ente autárquico, descentralizado en lo administrativo, técnico y financiero, con personalidad jurídica y patrimonio propio, que pasa a ser la autoridad de aplicación de la política turística local. La norma deroga la ordenanza del Consejo de Turismo, transfiere bienes y recursos de la Secretaría de Turismo a la nueva agencia y prevé que empiece a funcionar desde la sanción de la ordenanza.
La Agencia tendrá un directorio de seis miembros: dos representantes del Ejecutivo (presidente y vicepresidente), un representante de la Cámara de Turismo, uno de las Cámaras de Comercio, uno de la Asociación de Agencias de Viaje de Río Negro y uno del bloque mayoritario del Concejo Deliberante, todos con voz y voto. En caso de empate en las votaciones, el presidente tiene voto doble, lo que consolida la capacidad de decisión del sector público dentro de un esquema formalmente mixto.
La defensa política del proyecto
El primero en hablar fue Bruno Helrieguer, en representación de la Secretaría de Turismo de la provincia, quien reivindicó el proyecto como una herramienta de “modernización” de la gestión turística y de adaptación del Estado a una actividad dinámica y cambiante. Helrieguer destacó que el modelo replica experiencias de Córdoba, Mendoza, Neuquén, Chubut y de la reciente Agencia de Turismo de Río Negro, y que el objetivo es unificar bajo un mismo paraguas la promoción, la infraestructura, los servicios y la fiscalización turística.
Desde el oficialismo, la concejal Laura Rojas valoró la creación de un ámbito donde confluyan lo público y lo privado como espacio de construcción para diseñar políticas integrales que contemplen promoción, medio ambiente, empleo y mirada del vecino y del visitante. Rojas también celebró que el Estado “suelte” parte del control absoluto del área y lo deposite en un organismo con participación de actores directamente vinculados al turismo local.
Acompañamientos críticos y reparos legales
El concejal Efraín Ranea acompañó el proyecto pero marcó que en el origen hubo “cortocircuitos” en el diálogo con el sector privado, que venía trabajando en un proyecto más amplio que luego derivó en esta versión. Ranea apoyó la figura de ente autárquico con caja propia como herramienta para ganar dinamismo y gestión, pero cuestionó que, ante un empate entre privados y sector público, el poder siga quedando en manos del Estado por el voto doble del presidente.f
La concejal Rosa Monsalve fue la única que votó en contra y centró sus críticas en dos ejes: la falta de una audiencia pública previa, que a su entender exige la Carta Orgánica para la creación de entes autárquicos, y la mayoría requerida para aprobar la ordenanza. Monsalve señaló que el proyecto configura un ente autárquico y que, por carta orgánica, debería haberse aprobado con dos tercios de los miembros, mientras que el texto habla de aprobación por cuatro votos, además de remarcar el descontento de las cámaras turísticas que habían manifestado su desacuerdo en comisión.
La polémica con los privados y el cierre abrupto
Durante la sesión se generó un fuerte malestar entre representantes privados vinculados al turismo que habían pedido la banca del vecino para exponer su posición y no se les concedió, lo que disparó acusaciones de falta de escucha y de “corte” del diálogo. El presidente del Concejo recordó que esos actores ya habían participado de reuniones de comisión, mencionó expresamente a referentes como Cordero y John Naber, y sostuvo que muchas de las observaciones privadas quedaron plasmadas en el texto final, pero se negó a reabrir el debate en plena sesión.
La tensión creció cuando, luego de la intervención del concejal Castillo defendiendo que el proyecto es “el primer paso” de una construcción que se podrá seguir ajustando desde la agencia y desde el Concejo, desde el sector privado intentaron volver a tomar la palabra y el presidente decidió cerrar la discusión y pasar directamente a la votación. El resultado final fue de seis votos positivos (Castillo, Kalabazini, Pérez, Ranea, Rojas y Guasco) y uno negativo (Monsalve), con lo que la creación de la Agencia de Turismo El Bolsón quedó aprobada.
Fuente: Concejo Deliberante de El Bolsón /
